Los hermanos Coen

Ayer disfruté una vez más de una de sus creaciones "Quemar después de leer". Estos hermanos que homenajean al mejor cine negro y de terror,

su misterioso ingenio y retorcido sentido del humor han vuelto a hacerme reir en el cine y me han vuelto a hacer saltar de la silla por el susto, como ya me ocurrió con Fargo. Y nuevamente he disfrutado de Frances Mcdormand que está fantástica.

Qué ironía más fina tienen estos dos!!

Me encantan las comedias de enredo, el "lío más lioso" que confunde y desespera.

Lo que todavía sigue costándome es la violencia utilizada como técnica, muchas veces, de avance. Sigo dando botes en la silla del cine y soltando un "¡¡Joder!! ¡¡Qué fuerte!!", acompañado de una risita posterior y un "¡UF!"

Es una violencia que me duele en el estómago y a veces me produce náuseas.

En fin, que estos dos no me dejan indiferente, me hacen emocionarme (para bien o para mal), sentir, pensar. ¿Qué más puede desear un creador de películas, no?

Solo añadir que Brad Pitt es un actor con mayúsculas. Me impresionó verlo como un memo, cuando estoy acostumbrada a verle en papelones, con mirada profunda y esa gran gama de poses propios de sus personajes. George Cloony una vez más impecable, como siempre en estas pelis.